No se fíe de aquellos que dicen que volverían a recorrer el mismo camino tras equivocaciones y errores varios.
Las malas experiencias te marcan y, aunque a veces es bueno aprender a base de golpes, tampoco hay que ser gilipollas.
Los tiempos de poner la otra mejilla han pasado.
No se trata de pisar, pero si me das una leche ten por seguro que antes o después recibirás la tuya. Bueno, si es más tarde las probabilidades de que me olvide y sea la vida la que te la dé aumentan.
Y me gusta esa justicia del tiempo.
En parte creo que al final de nuestra vida queda un balance entre en lo bueno y lo malo, energía positiva o negativa.
Al final seremos polvo y energía, recuerdos y fotos traidoras, facturas y algún legado.
Y en ese final, si te dan la opción de volver a mirar atrás, desearás borrar muchos momentos.
Así que ahora no me vengas con aquella maldita frase, porque desde luego yo no volvería a recorrer el mismo camino. Seguiría otro, quizá parecido pero no igual.
Pero como no puedo, me he propuesto que el lunes 23/07/2012 ha sido un punto nuevo.
¿Será a prueba de incendios?
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