domingo, noviembre 04, 2007

Las reclamaciones por Rolex perdidos en la Costa del Sol superan los relojes existentes de la marca

Las reclamaciones que las aseguradoras británicas reciben de individuos que aseguran haber perdido un Rolex en la Costa del Sol supera la cifra de relojes que esa marca de lujo ha puesto en el mercado.


">LITTLE BRITAIN - LINDA


Así consta en un ránking del diario 'The Times' de las 25 reclamaciones más absurdas planteadas por británicos que suscribieron un seguro de viaje, y que incluye un buen número de historias que suceden en España debido a que éste es el destino turístico preferido de los británicos.




"Según un asegurador de larga trayectoria", afirma el diario, "ha habido más relojes Rolex Oyster, cuyo valor supera las 1.000 libras (1.420 euros), denunciados como perdidos en la Costa del Sol española de los que nunca han sido fabricados".


LITTLE BRITAIN - ANNE


Otra reclamación pintoresca, pero más verosímil, la planteó un inglés que aseguró que, en Gibraltar, un mono le robó la cámara de fotos. La aseguradora aceptó indemnizarle por la cámara, pero se negó a devolverle el dinero del viaje.



Otro inglés que se mareó en un barco en la bahía de Vizcaya, hasta el punto de devolver por la borda y arrojar de paso al mar su dentadura postiza, consiguió que la aseguradora le indemnizara en concepto de equipaje perdido.



Sin abandonar el mar, a otro caballero le sucedió que una ráfaga de viento marino le arrancó el peluquín, que cayó al agua junto con parte de su autoestima, pero al menos logró el pago de una compensación de la aseguradora por el coste del bisoñé.


LITTLE BRITAIN - REVERENDO


Asimismo, un británico de vacaciones en España vio cómo un perro mordía su cámara, que había dejado colgada de un banco, y salía corriendo con ella. Le reembolsaron por daño accidental.


LITTLE BRITAIN - ANDY


Sin embargo, otro padre británico de viaje por España no logró la comprensión de la aseguradora cuando, enarbolando el seguro de viaje, reclamó una indemnización por el disgusto y las lágrimas derramadas por su hija al ver el corte de pelo que le habían hecho en una peluquería.


LITTLE BRITAIN - EN EL EXTRANJERO


Otra reclamación, que no tiene por escenario a España pese a que el protagonista es un toro, sucedió en la ciudad de Kerala, en el sur de India. El corneado británico, pese a no saber explicar los mótivos por los que el animal la emprendió con él, consiguió que la aseguradora se hiciera cargo de los gastos médicos, por casi 4.000 euros.

No hay comentarios: