Miro al cielo y no sé ni qué preguntar
ni qué esperar.
Hay grandes laberintos esperando fuera,
olvidé lo esencial
y me recorro como un perro que busca morderse el rabo
y nunca lo logra.
Algo me sigue fallando
porque medias sonrisas
son medias tristezas.
Va todo muy rápido,
sin tiempo para asimilar nada.
Estos días tuve varios minutos para perderme en la soledad del campo:
verde, hojas amarillas, niebla, ruidos, cascabeles,
ovejas, huellas de jabalí,
choto, más niebla, frío, fiebre,
medicinas, cuestiones a medio plazo,
cuestiones que no he asimilado todavía,
pensamientos proyectados a los demás,
proyecciones del pensamiento,
ideas vitales, ¿realizables?, sin euros jodido...,
niños, balón, lluvia, mojado, chimenea,
siesta, despertar por niños,
juegos, país,
móvil, anécdotas, nuevas perspectivas,
ideas cerradas, gritos, goles,
hotel, catarro, almohada baja,
calaveras, mezquita, sinagoga, iglesia,
ermitas, ¿y si con la bici...?,
perro que no vimos,
carretera y manta,
mucha más niebla, más lluvia,
y yo no quiero volver.
*NO HAY COSA QUE MÁS DESEE QUE PERDERME DEL MUNDO*
Si encontrara la manera y la fórmula...
...quiero una vida con sentido,
el sentido de la vida que quiero
El futuro puede estar lejos, pero...
- ¿Trabajo?
- ¿Fútbol?
Y YO NO QUIERO VOLVER.
NO, NO... NO QUIERO VOLVER A NINGÚN SITIO.
"...PORQUE ALLÁ DONDE VOY, ME LLAMAN EL EXTRANJERO,
PORQUE ALLÁ DONDE VOY, EL EXTRANJERO ME SIENTO..."
Quiero caminar, avanzar, conocer,
experimentar, olvidar, encontrar,
producir, lograr, luchar,
soportar, caer, sonreír, VIVIR...
Y SOBRE TODO MIRAR AL CIELO Y DECIR
ESTO ES LO QUE PROMETÍ, LO CUMPLÍ,
TODO SE ACABÓ,
PUEDO IRME EN PAZ.
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